Nostalgia es aquello que no siempre puedes recuperar... Pero son los recuerdos... que jamás nadie, te podrá quitar...
Para mi es un gran placer traer a todos ustedes de BARRAEZO PRESENTA esta recopilación de exitos de Miguel Itriago quien ha sido uno de los ídolos de la canción popular venezolana que aún hoy, después de mucho tiempo, es recordado con verdadero cariño y admiración por su público el cual lo sigue recordando simplemente como “Miguelito”. Su llegada al mundo del espectáculo fue en cierto modo repentina, al igual que lo fue su inesperado retiro del mismo. A modo de hacer de recordatorio de quien es Miguel Itriago voy a colocarles una entrevista realizada en el blog MAGAZINE DIGITAL por el Sr. Alfredo Churion conversando con Miguel:
-“Miguel: ¿En donde naces?”
- “Soy caraqueño de La Pastora, la parroquia más popular de la capital”.
- “Y ¿Cuándo comienza tu acercamiento a la música? ¿Cuales son tus recuerdos musicales de aquellos años?”
- “Siempre me ha gustado la música romántica, aunque mis inicios fueron como cantante dramático. Yo empecé a estudiar canto y todos los profesores me decían que ese era mi camino y que me olvidara de la música romántica. Pero además, imagínate que una vez fui cantante de guarachas en un grupo que teníamos”.
- “¿Cuáles eran tus influencias respecto a cantantes?
- “Para mi el más grande de todos siempre ha sido Benny Moré. Una vez que tenía yo como 14 años lo estaban presentando en el Coney Island de Los Palos Grandes y para allá me fui, a pesar de que no me dejaban entrar solo por ser menor de edad. Y no recuerdo como me coleé, pero lo cierto es que ese día pude verlo cantando”.
- “¿Cómo haces para entrar en el medio artístico?”
- “A mi desde muy muchacho me ha gustado cantar. Siempre he tenido una voz muy fuerte. Siempre cantaba en las fiestas y por recomendación de mis amigos comencé a estudiar canto. Yo trabajaba para la época como cobrador en el Banco de Venezuela- era el año 1959- y una vez andaba por Puente Hierro y vi un letrero que decía Escuela de Canto: Eduardo Lanz. Y allí entré y comencé a vocalizar y a educarme para lo que me gustaba”
Eduardo Lanz ha sido un personaje importantísimo en la historia del canto en Venezuela. No solamente fue un gran tenor con una buena cantidad de éxitos -inclusive a nivel internacional- logrados, sino un verdadero forjador de talentos a través de su academia, la misma de la que nos habla Miguel. De la Academia de Eduardo Lanz los artistas salían directamente a hacer presentaciones en televisión, especialmente en el programa El Show de Saume, animado por el popular Víctor Saume.
- “¿Recuerdas a algún compañero en la academia que hubiese alcanzado la fama después?
- “No, en realidad no. Allí los que recibían clases eran cantantes ya formados. Héctor Cabrera, Lila Morillo que empezaba a estudiar en la academia y Estelita que formaba parte de Los Zeppy, aunque en esos momentos el grupo ya se estaba disolviendo”.
- “Y llega un momento en que entras al Show de Saume”
- “¡Claro” Eso fue por la influencia de Eduardo”.
- “Y ese es el momento en que te haces un ídolo”
- “Bueno, más o menos. En ese momento llegó la idea de un señor llamado Luís Guevara Manosalva, en aquel tiempo, Jefe de Relaciones Públicas de los relojes Nivada, de presentarme con una capucha. La persona que adivinara quien era se ganaba unos premios. Ya Néstor Zavarce se había presentado con una capucha, con la diferencia de que yo tenía ya tiempo cantando. Total que me presenté como “El Cantante Incógnito” y la persona que me identificó ganó un almuerzo conmigo en un restaurante del este y un reloj. Pero claro, eso me servía como promoción”.
- “¿Ya habías comenzado a grabar en esa época?”
- “No, aún no había comenzado a grabar. Pero muy poco tiempo después el periodista Felo Giménez me llevó al sello Velvet y allí grabé 3 discos de larga duración y varios temas sueltos en discos con varios artistas. Felo me ayudó mucho en mis comienzos. Para la época me dieron un bono de diez mil bolívares. Allí pegué temas como “¿Porqué te conocí?”, “Vieja Carta” y sobre todo “Poema” el que me llevó hasta Puerto Rico, República Dominicana, Colombia, Argentina y México”.
- “En esa época había -sobre todo en Caracas- una vida nocturna muy intensa. ¿Recuerdas alguno de los locales en que te presentaste en aquellos días?”
- “¡Como no! El Jacal, en Sabana Grande, El Duende y el Hotel Tamanaco. Por cierto que en este último había una foto mía que duró muchos años. Y es una anécdota muy simpática. Resulta que yo fui a trabajar con Lola Flores. Era la época en que yo estaba sonando muy bien. Y por recomendación de Chicho Barbarossa que era el director musical ensayé como ocho temas. Y la sorpresa es que el representante de la artista- Antonio González “El Pescadilla”- que era además su guitarrista y esposo revisa mi repertorio y me dice que no puedo cantar tantos temas, sino solamente tres, ya que la estrella era su esposa. Pero al terminar de cantar el tercero la gente comenzó a aplaudir y a pedir otra. El tipo- que por lo demás era antipatiquísimo y prepotente- estaba furioso y decía que Lola Flores no iba a actuar. Y cuando el show terminó un grupo de amigos me sacó en hombros. Y esa foto estuvo hasta hace poco en la boite del hotel”.
- “Al igual que Raúl Naranjo desapareces intempestivamente del ambiente… ¿Porqué?”
- “Te voy a ser muy sincero. Tuve mucho miedo. En esa época entran los grupos internacionales con música extranjera que acaban con la música romántica y el trabajo empezó a bajar mucho. Ya tenía familia, me ofrecieron un trabajo fijo en una empresa y no lo pensé mucho. Pero claro que me quedó el gusanito por dentro. En mi casa siempre canto y la añoranza por el público y por el aplauso siempre la he tenido. Me retiré completamente en el año 1974. Yo era administrador de las dos bombas de gasolina de la autopista Caracas-La Guaira y la gente que pasaba por allí me decía:”Miguelito ¿Qué pasa que no has vuelto a cantar?”. Yo creí que lo estaba haciendo bien, pero comprendo que estaba equivocado. Total que estaba en mi casa hasta que llegó el amigo Ugueto para sacarme del encierro. Y esto ha sido increíble porque a mi me encanta cantar. Para mí, la canción es vida. Yo siento lo que canto y será por eso que me conservo. Siempre estoy tratando de cuidarme”..
- “¿Ves grandes cantantes hoy día?”
- “Hay una gran cantidad de muchachos que cantan muy bien, pero ninguno me ha llamado la atención. El reggetón es una moda y yo digo que no me gusta, pero a veces está sonando uno y yo-inconcientemente- me pongo a mover el cuerpo”.
- “Ahora que te están “redescubriendo” ¿Tienes esperanzas de cerrar tu carrera con broche de oro?”
- “De verdad que si quisiera tener un nuevo aire”.
- “¿Todavía te dicen Miguelito?
- “¡Todavía! El público siempre me tuvo mucho cariño. Desde muchacho me han dicho así porque a mi papá, en La Pastora, lo llamaban igual”.